En llamas... ¿el llano?



Miro la ventana, ejercito mis ojos buscando la respuesta en la calle, es como cuando estoy en el trabajo y en mi tiempo perdido no sé qué hacer. En la oficina puedo buscar la belleza femenina a través de una falda, sé que la respuesta que busco nunca está ahí pero me tranquiliza saber que intento encontrar algo. Ayer visité a tío Zambrano, me dijo que necesitaba tranquilizar mis críticas hacia él, me explicó que él no tiene la culpa por lo que pasa el partido. ¡Qué tipo! Me dio motivos para que yo siga pensando qué haré con los problemas de la sociedad. Las cosas no se han solucionado con las nuevas reformas, y yo que debo entregar un proyecto que salve al país. Necesito concentrarme, ver que hay una respuesta coherente en cada pregunta insensata. Si tan sólo el Periquillo estuviera vivo. ¡Ay! por qué nos dejaste unos siglos antes, ahora nadie entiende el sarcasmo y todos somos un juego de idiotas.

Estoy harto de saber que la respuesta democrática no existe, que la naturaleza del hombre se sumerge en la inmensidad de la ignorancia colectiva. ¿Mi país es acaso el peor del mundo? ¡Maldita Revolución! ¡Maldito Cambio! ¡Maldito el que cree que existe la política! Tío Zambrano tiene toda la razón, si quiere llegar lejos en la política debe estar del lado del poder, así ha sido siempre desde que Mur estaba enamorado de Mimis. ¡Ay Zambrano! ¿Qué no te das cuenta que ere un pelele del poder? Reacciona y haz algo por el sol, que de tanto brillar con tanto chisme, se vuelto opaco y cenizo, ya pesa la polvareda del patio trasero de Patriotismo.

La ventana no me sirve, debo pensar en la solución de un cambio eficiente, otra vez esta idea maldita que no sirve para nada, pero hay que decirla a los mexicanos que tanto creen en ella. Lo que necesitamos es una técnica de publicidad quizá, siempre sirven para atraer a la plebe enardecida. Mmm…si mi tiito estuviera aquí inspirándome, la respuesta sería más fácil. Sé que Marcelo empezó astutamente sus movimientos de  ajedrez, mi tío lo sabe y yo debo darle una respuesta.

¿Democracia? ¿Nuevo líder? ¿Nuevo partido? ¡Esto último no!, ya se está formando uno más y seguro el padrinazgo sigue presente. ¡Maldito poder!, me matas, quiero tenerte y destruirte. ¡Ya sé!, tenemos que sacar adelante una "Reforma" más y después salirnos del juego, pero ¿si los revolucionarios siguen en el poder entonces estaremos jodidos? ¿Cómo no pensé esto antes? Ni Cristo puede salvarnos del terror de la vergüenza, ¿Qué fácil sería comprar mi puesto? Así como mi familia compró al país en los años ochenta. ¿Por qué no no todos nacimos siendo un Salinas o de perdida un Madero?...Tío, perdóname si lees esto, la verdad ya no sirves para nada, quizá Marcelito pueda darme un puesto y si no, me conformo con rascarle al verde, blanco y rojo, ahí siempre reciben a los amigos, es decir, a los que sabemos camuflarnos en la política.


Que el Dios de la política perdone a los mentirosos, pues de ellos está lleno el reino del poder. Si mi presidente hablara con sensatez…¿Dónde está la respuesta? Tío Zambrano debes saber que antes de toda traición sería algo bastante raro y al mismo tiempo arriesgado creer que Marcelo te dará cabida en su gobierno, pues aunque no lo creas tiene más de político que Peña, perdón por la traición, perdón por la sinceridad, pero como sabes, si llego al poder algún día tendrás una de las Secretarías que sirven para hacer riquezas, quizá la de Energía o algo de Seguridad. Sólo recuerda no desaparecer a demasiados, que a final de cuentas con pocos, el pueblo no se da cuenta de lo que pasa.