Escuela de Toronto y cambios tecnológicos



31 de octubre de 2010

Recomiendo: Ensayo Mundo global

La ecología de medios, conocida también como“Escuela de Toronto”, “Escuela de Nueva York”, e incluso como “Escuela de San Luis”, parte del pensamiento de Marshall McLuhan, para enriquecerse significativamente con las contribuciones de reconocidos académicos e intelectuales como Neil Postman, Joshua Meyrowitz, Paul Levinson, James W. Carey, Jay David Bolter y Lance Strate, entre otros. De acuerdo con Neil Postman, el objeto de estudio de la ecología de medios es el siguiente:

La ecología de los medios analiza como los medios de comunicación afectan la opinión humana, la comprensión, la sensación, y el valor; cómo nuestra interacción con los medios facilita o impide nuestras posibilidades de supervivencia. La palabra ecología implica el estudio de ambientes: su estructura, contenido e impacto en la gente2.

Los reconocidos fundadores de la Media Ecology, Ecología Mediática o “Escuela de Toronto”–, Neil Postman y Marshall McLuhan mencionan que el  impacto de toda nueva tecnología no es aditivo sino “ecológico”.

Efectivamente, el impacto de Internet en las sociedades contemporáneas es profundo, complejo e irreversible.

De acuerdo con Thomas Friedman, autor del libro La Tierra es plana. Breve historia del mundo globalizado del siglo XXI (2006: 164): “Jamás en la historia del planeta tanta gente ha tenido la posibilidad de buscar por sí misma tanta información acerca de tantos temas o acerca de tanta gente”. Además de la abundante información que hoy es posible consultar a través de Internet, la velocidad en el procesamiento de la información ha registrado notables incrementos. Se estima que a finales de la presente década las computadoras podrían llegar a alcanzar velocidades petaflops, es decir, capacidades para realizar mil billones de operaciones matemáticas por segundo.

El tránsito hacia la sociedad de la información y el conocimiento depende fundamentalmente de dos variables que guardan estrecha relación entre sí: infraestructura e info-estructura. La infraestructura comprende “una red suficientemente dimensionada (es decir, con suficiente ancho de banda), de fácil acceso, barata, abierta a ciudadanos y organizaciones” (Cornella. 2002: 37). La info-estructura “deriva de la idea de que la riqueza de un país con infraestructura no se genera como simple consecuencia de tenerla, sino de usarla, de explotarla. La info-estructura consiste en todo aquello que permite sacar rendimiento de la infraestructura.

El adecuado desarrollo de la info-estructura de un país supone radicales reformas en no pocas instituciones. Algunas de las reformas que propone Cornella son (2002:38): un sistema educativo que tenga por objetivo esencial enseñar a aprender; un sistema ciencia-tecnología que aproveche la capacidad creativa de los ciudadanos y la transforme en nuevos productos y servicios competitivos en mercados mundiales; un sistema legal capaz de responder a los retos que impone la velocidad de desarrollo de las tecnologías; una base de contenidos que haga posible que las actividades de ciudadanos en la era de la información sean más fáciles; un entorno fiscal que facilite el surgimiento y desarrollo del sector información local; una administración que sea ejemplo en el uso eficiente y eficaz de las tecnologías de información.


En el desarrollo de todo medio de comunicación es posible percibir cómo progresivamente el medio es transformado con el propósito, no siempre consciente o deliberado, de hacerlo más parecido al hombre. En la ecología de medios ese proceso es conocido como “remediación”. El proceso de remediación de los medios de comunicación es el resultado de la adecuación dialéctica que permite transformarlos hasta convertirlos en lógicas extensiones de nuestras facultades, órganos o sentidos. El concepto “remediación”, sin embargo, admite por lo menos dos posibles interpretaciones en ecología de medios.

Neil Postman apunta las 5 cosas que  debemos saber acerca del cambio tecnológico

Primera idea
La idea número uno, entonces, es que la cultura siempre paga un precio por la tecnología.

Segunda idea
Las ventajas y desventajas de nuevas tecnologías nunca están distribuídas equitativamente entre la población.
Las preguntas, entonces, que nunca están lejos de la mente de una persona que tiene conocimiento acerca del cambio tecnológico son estas: Específicamente quién se beneficia con el desarrollo de una nueva tecnología? Cuáles grupos, qué tipo de persona, qué tipo de industria serán favorecidos? Y, por supuesto, cuáles grupos de personas serán afectados en consecuencia?

Esta edad de la información puede convertirse en una maldición si estamos tan enceguecidos por ella como para no ver en dónde yacen realmente nuestros problemas. Es por eso que siempre es necesario que preguntemos a aquellos que hablan de manera entusiasta sobre la tecnología de computadores, ¿por qué lo hace? ¿Qué intereses representa? ¿A quién espera darle poder? ¿A quién va a quitarle poder?

Con esto no quiero atribuir motivos desagradables, ni mucho menos siniestros a nadie. Sólo digo que dado que la tecnología favorece a ciertas personas y perjudica a otras, hay preguntas que siempre deben hacerse. Así, que siempre hay ganadores y perdedores en el cambio tecnológico es la segunda idea.

Tercera
...cada tecnología tiene un prejuicio...

Tal vez podemos decir que una persona informática valora la información, no el conocimiento, ciertamente no la sabiduría. De hecho, en la edad de los computadores, el concepto de sabiduría podría terminar por desvanecerse.

Cada tecnología tiene una filosofía que es expresada en la forma en la cual hace que las personas usen su mente, en lo que hace a nuestros cuerpos, en cómo codifica el mundo, en cuáles de nuestros sentidos amplifica, en cuáles de nuestras tendencias emocionales e intelectuales ignora.

Cuarta
El cambio tecnológico no es aditivo, es ecológico.

Un nuevo medio no agrega algo; cambia todo.

Por eso debemos ser cautos frente a la innovación tecnológica. Las consecuencias del cambio tecnológico son siempre vastas, a menudo impredecibles y ampliamente irreversibles.

Sus pruebas [IQ, SAT, GRE] redefinieron a lo que no referimos como aprendizaje, y han llevado a que reorganicemos el currículo para acomodar las pruebas.


Quinta
...los medios tienden a volverse míticos. Uso esta palabra en el sentido en el cual fue usada por el crítico literario francés Roland Barthes. El usaba la palabra "mito" para referirse a una tendencia común de pensar en nuestras creaciones tecnológicas como si fueran dadas por Dios, como si fueran parte del orden natural de las cosas.

Autos, aviones, TV, películas, periódicos-- han alcanzado un estatus mítico porque son percibidas como regalos de la naturaleza, no como artefactos producidos en un contexto político e histórico específico.

Cuando una tencología se vuelve mítica, es siempre peligroso porque entonces es aceptada tal cual, y por consiguiente no es fácilmente susceptible a modificación o control.

...en cada gran tecnología hay incorporado un prejuicio epistemológico, político o social.



Ver
En la breve y fecunda historia de Internet, las remediaciones han sido frecuentes. Entre las remediaciones más significativas se destacan la introducción de la web en los primeros años de la década de los noventa, y el desarrollo de los blogs a finales de la misma década. La web, generosa aportación de Tim Berners-Lee –quien hoy se desempeña como director del World Wide Web Consortium–, aceleró la socialización de Internet. Los blogs o bitácoras permitieron que usuarios no expertos en informática fueran capaces de poder publicar contenidos en Internet. El desarrollo de la web 2.0 admite ser considerado como un auténtico momento histórico en la evolución de Internet.

El desarrollo de la web 2.0 impuso importantes cambios tanto en el comportamiento como en los hábitos de consumo cultural de los cibernautas. El cibernauta accedió a la condición de prosumidor.

La palabra prosumidor –en inglés, prosumer–, es un acrónimo que procede de la fusión de dos palabras: “producer” (productor) y “consumer” (consumidor). El concepto “prosumidor” fue anticipado por Marshall McLuhan y Barrington Nevitt, quienes en el libro Take Today (1972), afirmaron que la tecnología electrónica permitiría al consumidor asumir simultáneamente los roles de productor y consumidor de contenidos.

Castells, M. (1996). The rise of the network society. USA: Blackwell Publishers.
Cornella, A. (2002). Infornomía!com. La gestión inteligente de la información en las organizaciones. España: Deusto.
Osborne, D., y Gaebler, T. (1992). Reinventing government. How the entrepreneurial spirit is transforming the public sector. USA: Addison Wesley.
Rosecrance, R. (1999). The rise of the virtual state. Wealth and power in the coming century. USA: Basic Books.